Estoy de acuerdo contigo...
Y eso contrasta con la educación que si existe en la montaña. Nos gusta hacer alguna que otra excursión por el monte, y siempre te cruzas/encuentras/adelantas a alguien...
Siempre saludas y te saludan. Un simple "Buenos días/tardes".
Mi hijo, cuando era más pequeño, me preguntaba si los conocía. Y yo le explicaba que no. ¿Y porque los saludas? Por educación hijo. Ahora, con 11 años va pensando en sus cosas (la tablet, los legos, los vídeos de YouTube...) pero cuando le saludan, responde.
Step by step.
Es verdad que en ciertas actividades existe una complicidad que hace que la gente se salude, respete, ayude..., como bien dices puede ser el montanismo, pero en cuanto este u otro ámbito se globalice caerá en la dejadez educativa.
Antes, cuando ibas en moto, te saludabas siempre, e incluso, en los semáforos, había comunicación entre moteros (evidentemente sin conocerse de nada), ahora el saludo ya es un 50% y el resto desapareció. Cierto que antes había menos moteros y quien iba en moto era porque le gustaba, ahora la mayoría son por funcionalidad (atascos, consumo....) y eso hace perder la esencia educativa.
Otro ejemplo, hace 30/35 años el que usaba un ordenador (PC) era porque le gustaba (poco introducidos en el mundo laboral estaban en España), así pues, el que más y el que menos tenia y/o adquiría nociones de informática, porque le gustaba, ahora como son una herramienta imprescindible, la mayoría los utiliza porque no puede decir que no, pasando de saber/aprender como funcionan, solo lo imprescindible para hacer el trabajo.
En rasgos generales, la saturación por obligación o por modas hace que se pierda la empatía y por simpatía, la educación.
A parte, cada vez hay menos gente que se interesa del porqué de las cosas (en todos los campos), las utiliza y ya está y eso (creo) hace perder la simbiosis con el entorno, sea físico como social.
Las palabras,
hola, buenos días, gracias, perdón..., están en claro desuso y eso por supuesto es la consecuencia de que el nivel de educación (muchas veces por culpa del "somos demasiados haciendo lo mismo") cae en picado.
Seguramente serán los "nuevos tiempos", y un servidor arrastra 50 primaveras a sus espaldas y eso supongo se tiene que notar, y no siempre para bien.