Me presento Nuevo por aqui
- Iniciador del tema Manolenta
- Fecha de inicio
V4L
Miembro Master
Gracias por la bienvenida, intento contar más de mi experiencia hasta ahora con el coche.
Bueno, buscaba hibrido y familiar, que no fuera todo terreno porque al final nunca le he dado uso de verdad a los todo terreno. En el puerto de Alicante, por lo de la Volvo Ocean Race, tuvieron expuestos toda la gama y allí vi el V90 CC por primera vez. Me encanto, una línea muy interesante, pero no lo hacen híbrido, así que me decanté por el normal, que sigue siendo muy chulo, aunque un punto por debajo del CC (para mi gusto). Coincidió que había una buena campaña con el Banco Santander y la financiación que me ofrecieron fue muy buena, así que me decidí por cogerlo finalmente. Frente a otras alternativas (Merces Clase E, BMW 5 touring, etc...) el precio era superior, pero el coche también está un punto por encima en casi todo (al menos en el papel).
En cuanto a la experiencia, llevo solo 4000km, asi que tampoco puedo hablar con demasiad profundidad, pero ya hay cosas claras que no me gustan. La gestión híbrida es muy mala comparada con otros coches, vengo de un "sencillo" Outlander PHEV y podías forzar el modo eléctrico, apretandole todo lo que daba el coche, y el comportamiento era más que suficiente para el uso diario. En el Volvo parece que se han obsesionado con la autonomía, por lo que en el modo eléctrico es absurdamente poco dinámico, y si a eso se le suma que a la mínima activa el motor de explosión, la experiencia en el modo eléctrico "pure" es un poco de broma, tienes que ir muy fino para que no salte el gasolina. Es algo que debería revisar en la programación, si el usuario elige "pure", que no haya forma de encender el gasolina salvo si pisas a fondo, como en el resto de híbridos enchufables que he probado. Esto es especialmente molesto en garajes y pequeñas rampas, ya que yendo a 5kmh se activa el gasolina en seguida, y es el momento donde más sentido tiene el modo eléctrico, un gran fallo que destroza la experiencia de conducción.
Otro punto muy negativo es la calidad de los materiales, al menos en el asiento del conductor. Con este poco uso, ya tiene una zona desgastada, eso me parece terrible para un coche de esta supuesta calidad. Falta ver cómo responde el servicio de garantías, ya os contaré si dan la cara o no, pero es obvio que es un fallo en el material, porque por el diseño del asiento, es imposible sentarse sin rozar en esa zona, por lo que o no lo han probado en el control de calidad, o el material es directamente malo.
Eso las pegas, que por el momento veo graves pero subsanables. En cuanto a los pros, pues destacaria que es un coche espectacular para viajar. La insonorización es muy buena a pesar de tener techo panorámico. Puedes hacer un porrón de kilómetros sin cansancio, los sistemas de ayuda y seguridad son muy buenos. Y la potencia, claro está, le da un plus de diversión al coche, aunque tampoco es que la use demasiado, pero cuando hace falta es una gozada. No calificaría el coche como deportivo, porque a pesar de la potencia teórica (430CV con la preparación Polestar) esta potencia real dudo que se alcance salvo en momentos puntuales, siendo la potencia más realista la del motor térmico sólo, unos 340CV. Para un coche de 2100 kilos no es algo tremendo, comparando con un Maseratti Quatroporte (400CV) las sensaciones son más burguesas.
Me he venido arriba, vaya ladrillazo
Bueno, buscaba hibrido y familiar, que no fuera todo terreno porque al final nunca le he dado uso de verdad a los todo terreno. En el puerto de Alicante, por lo de la Volvo Ocean Race, tuvieron expuestos toda la gama y allí vi el V90 CC por primera vez. Me encanto, una línea muy interesante, pero no lo hacen híbrido, así que me decanté por el normal, que sigue siendo muy chulo, aunque un punto por debajo del CC (para mi gusto). Coincidió que había una buena campaña con el Banco Santander y la financiación que me ofrecieron fue muy buena, así que me decidí por cogerlo finalmente. Frente a otras alternativas (Merces Clase E, BMW 5 touring, etc...) el precio era superior, pero el coche también está un punto por encima en casi todo (al menos en el papel).
En cuanto a la experiencia, llevo solo 4000km, asi que tampoco puedo hablar con demasiad profundidad, pero ya hay cosas claras que no me gustan. La gestión híbrida es muy mala comparada con otros coches, vengo de un "sencillo" Outlander PHEV y podías forzar el modo eléctrico, apretandole todo lo que daba el coche, y el comportamiento era más que suficiente para el uso diario. En el Volvo parece que se han obsesionado con la autonomía, por lo que en el modo eléctrico es absurdamente poco dinámico, y si a eso se le suma que a la mínima activa el motor de explosión, la experiencia en el modo eléctrico "pure" es un poco de broma, tienes que ir muy fino para que no salte el gasolina. Es algo que debería revisar en la programación, si el usuario elige "pure", que no haya forma de encender el gasolina salvo si pisas a fondo, como en el resto de híbridos enchufables que he probado. Esto es especialmente molesto en garajes y pequeñas rampas, ya que yendo a 5kmh se activa el gasolina en seguida, y es el momento donde más sentido tiene el modo eléctrico, un gran fallo que destroza la experiencia de conducción.
Otro punto muy negativo es la calidad de los materiales, al menos en el asiento del conductor. Con este poco uso, ya tiene una zona desgastada, eso me parece terrible para un coche de esta supuesta calidad. Falta ver cómo responde el servicio de garantías, ya os contaré si dan la cara o no, pero es obvio que es un fallo en el material, porque por el diseño del asiento, es imposible sentarse sin rozar en esa zona, por lo que o no lo han probado en el control de calidad, o el material es directamente malo.
Eso las pegas, que por el momento veo graves pero subsanables. En cuanto a los pros, pues destacaria que es un coche espectacular para viajar. La insonorización es muy buena a pesar de tener techo panorámico. Puedes hacer un porrón de kilómetros sin cansancio, los sistemas de ayuda y seguridad son muy buenos. Y la potencia, claro está, le da un plus de diversión al coche, aunque tampoco es que la use demasiado, pero cuando hace falta es una gozada. No calificaría el coche como deportivo, porque a pesar de la potencia teórica (430CV con la preparación Polestar) esta potencia real dudo que se alcance salvo en momentos puntuales, siendo la potencia más realista la del motor térmico sólo, unos 340CV. Para un coche de 2100 kilos no es algo tremendo, comparando con un Maseratti Quatroporte (400CV) las sensaciones son más burguesas.
Me he venido arriba, vaya ladrillazo
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