1- Lo más importante que debe recordar cuando hace una prueba de manejo de un coche usado es que usted es el cliente. Así es como usted debe enfrentar la prueba de manejo de un coche usado. Recuerde que el cliente siempre tiene la razón. Usted es quien debe establecer la agenda cuando se trata de efectuar una prueba de manejo. No es el vendedor ni el propietario.
Si algún aspecto de la prueba de manejo lo hace sentir incómodo, retírese. Confíe en su instinto.
La preparación es clave. Asegúrese que usted es un comprador de coches usados bien informado, antes de hacer la prueba de manejo. Un poco de trabajo de investigación lo llevará a un coche usado que supere sus expectativas.
Además, este no es el momento de diagnosticar problemas. Ese no es su objetivo en una prueba de manejo. Usted quiere identificar problemas que su mecánico pueda inspeccionar y ofrecer soluciones, incluyendo precios. No trate de resolver los problemas del vehículo durante la prueba.
2- Defina el Mapa de la Ruta de Conducción: No conduzca al azar y no permita que el propietario dirija el viaje. Google Maps o el tomtom pueden ayudarle. Configure la ruta de prueba con una mezcla de calles urbanas, carreteras, y un sitio de estacionamiento grande y vacío. Un trayecto largo en una carretera empinada, es un buen lugar para probar la aceleración del vehículo. Además, lleve un bloc de notas o una grabadora. Estos le pueden ayudar a recordar lo que le guste y lo que le disguste. Además le permitirán recordar lo que usted quiera que su mecánico inspeccione.
No lleve toda su familia a la prueba. Pueden hacer que se distraiga. Hágase acompañar de su cónyuge u otra persona que esté involucrada en el proceso de decisión. Si usted tiene niños pequeños, traiga sus sillas de seguridad o asientos elevados para comprobar si se pueden colocar bien. Eso sí, no traiga a los niños. Es necesario que usted pueda dedicar el 100% de su atención a la prueba.
Ejecute la prueba totalmente: Negocie la duración de la prueba de conducción. Solicite por lo menos media hora. Es poco probable que el propietario le permita hacer la prueba solo, pero vale la pena intentarlo. Además, solicite todos los registros del coche, incluyendo los registros de mantenimiento y asegúrese que las herramientas básicas para el cambio de neumáticos están en el vehículo.
3- Mientras el coche está estacionado. Camine alrededor del coche e inspeccione las llantas para verificar que están infladas adecuadamente. Mire si el parabrisas tiene peladuras o si la carrocería se ve muy deteriorada. Inspeccione el baúl para ver si cumple con sus necesidades de almacenamiento. Examine si el baúl muestra humedades. Doble el espaldar del asiento trasero para verificar si tiene paso hacia el baúl. Retire ambientadores de aire que podrían enmascarar olores.
Antes de salir. Verifique la facilidad para sentarse y salir del coche. Vea que tan fácil es abrir y cerrar las puertas. Pruebe los ajustes del timón. Asegúrese que el asiento puede ajustarse a su mayor comodidad. Ajuste todos los controles y vea qué tan fácil es entender cómo funcionan. Verifique los espejos para ver qué tan fácil es ajustarlos. Pruebe el aire acondicionado y la calefacción en sus máximos niveles. Si el coche tiene un sistema de ambientación en la parte de atrás, pruébelo también. Compruebe si todas las rejillas de ventilación funcionan bien. Mire con qué facilidad pasa el coche de un cambio a otro. Dele arranque al coche y verifique el esfuerzo requerido para dar vuelta a la llave y para retirarla cuando se apaga el vehículo. Asegúrese que el propietario tiene un juego de llaves de repuesto.
4- Camine alrededor del vehículo: Busque desperfectos en el parabrisas o un desgaste excesivo de la carrocería. (Habrá algunas abolladuras y rayones en casi todos los coches usados). Muchas abolladuras y rayones en la parte baja de la carrocería podrían indicar que el coche ha sido conducido en condiciones inferiores a las ideales. Asegúrese que los neumáticos están correctamente inflados. Eche un vistazo al maletero ¿Cumple sus necesidades de almacenamiento? Mida una bolsa de supermercado abierta para ver si cabe. Compruebe si el baúl se ajusta también a sus necesidades de recreación. No tiene que llevar su bici, pero una cinta métrica le sería muy útil. También, busque señales de fugas. Pregunte si el asiento trasero es abatible para dar más espacio y entonces asegúrese de que sí lo es. Limpie el aire: Tome el ambientador, si está colgado del espejo retrovisor y colóquelo en la guantera. Una vez haya terminado de conducir, haga una buena prueba de olfato al vehículo. No tenga miedo de pasar su nariz por los asientos para verificar si han aparecido olores. La Prueba del Guante Blanco: Mire el interior para buscar manchas o suciedades. Lo más probable es que están hace mucho tiempo si el propietario nunca los ha limpiado.
5- Si usted aún está interesado, pregunte al propietario cuando puede llevar el coche a su mecánico. Nunca decida comprar un coche que no ha sido inspeccionado en forma independiente. Usted se estaría arriesgando a sufrir muchos dolores de cabeza.
Haga sus notas de inmediato con las preguntas y preocupaciones que le transmitirá a su mecánico. Además, tómese un momento para calificar el coche. Use este sistema de evaluación que le será muy útil.
Si usted tiene dudas, retírese. Hay un montón de coches para la venta.
6- Entrada y salida: Entre y salga del coche un par de veces. Tenga una idea de qué tan cómodo es para usted, qué tan bien abren y cierran las puertas y qué tan pesadas son. Mire a ver qué tan fácil es alcanzar la manija de la puerta. Suba también al asiento trasero. Mire a ver si el vehículo va a ser un buen transporte para personas, si eso es importante para usted. Ubíquese en el asiento del conductor: Verifique si puede ajustar el asiento de acuerdo con su comodidad. ¿Los controles de ajuste del asiento son fáciles de operar cuando la puerta está cerrada? No se ponga en riesgo. Usted tendrá que pasar decenas de miles de kilómetros al volante. No haga ninguna cosa inferior a lo perfecto. Juegue con los controles: Ajuste los espejos. Mire si los controles del radio y los del aire acondicionado son de fácil acceso. Ajuste del timón: Verifique el volante para ver si se inclina o se pliega como un telescopio. ¿Lo puede colocar en una posición en la que se sienta cómodo? ¿Los botones de control de audio y de control de la velocidad de crucero trabajan correctamente? Prueba del aire acondicionado y la calefacción: Asegúrese que soplan aire frío y caliente. Pruebe el frío antes del calor ya que toma un tiempo para que el motor se caliente. El aire frío debe soplar en menos de un minuto. Coloque las temperaturas en sus extremos. Compruebe las rejillas de ventilación para ver si se cierran y abren suavemente. Ubíquese en el asiento trasero para asegurarse que los sistemas de aire acondicionado y calefacción funcionan allí, también. Obtenga una idea de la transmisión: ¿Pasa el coche con facilidad de la posición de parqueo a la de conducción si el coche tiene transmisión automática? Un ruido fuerte no quiere decir que haya un problema en sí, pero tome nota para que su mecánico pueda verificar que la transmisión funciona bien. Una transmisión manual debe pasar fácilmente entre los cambios. El embrague debe facilitar también la operación de la caja de cambios. Girar la llave: Es algo que va a hacer al menos dos veces al día durante todo el tiempo que sea propietario del coche. Observe si el coche arranca con facilidad: no solamente cómo arranca, sino cuánto esfuerzo es necesario para girar la llave. Además, vea qué tan fácil es quitar la llave. Por último, asegúrese que el vendedor tiene dos juegos de llaves e incluso una llave para valet. Las llaves pueden ser costosas de reemplazar.
7- En el camino Conduzca responsablemente. Mezcle la ruta entre calles y autopistas. Compruebe la dirección. ¿Hay mucho juego en la timón antes de que el coche responda? Pise fuertemente el freno cuando sea seguro hacerlo. ¿El coche tira hacia un lado? ¿Los frenos se sienten blandos? Suelte las manos del timón en un sitio de estacionamiento vacío. Esto le mostrará qué tan bien alineada está la dirección. Conduzca sobre una superficie irregular y vea cómo responde el coche. (Los reductores de velocidad son suficientes si no hay disponible un camino lleno de baches). Mantenga la boca cerrada. Escuche los problemas. Deje que el propietario del coche sea quien hable. Trate de estacionar el auto en un sitio de estacionamiento ocupado. Los habitantes de la ciudad deben ensayar el estacionamiento en paralelo. Ambos son buenos indicadores de la visibilidad del vehículo a baja velocidad. Final de la Prueba Si todavía está interesado, averigüe cuando puede llevar el coche a una inspección de su mecánico.
Haga de inmediato las anotaciones para que pueda preguntar a su mecánico sobre los problemas potenciales.
Califique el coche de 1 a 5 estrellas, lo que le ayudará a ordenar rápidamente los coches que está viendo. Si usted tiene alguna duda, retírese. Hay muchos coches para la venta.
8- Conduzca responsablemente: No corra como una liebre desde el principio. Hará que el dueño se ponga nervioso y, probablemente, dañará el negocio. Sin embargo, no dude en hacerlo una vez que se sienta cómodo con el vehículo. Solamente advierta al dueño que lo va a hacer. Conduzca por una ruta mixta: Observe qué tan bien entra el coche a una autopista. Observe cómo es la visibilidad en las calles urbanas. Observe qué tan fácil es la visión de las señales de tráfico. La dirección: ¿Cuando usted da vuelta al timón, la dirección responde con prontitud? ¿O hay alguna demora en la respuesta? El timón no debe tener ningún tipo de juego. Pruebe los frenos: Busque una zona tranquila, lleve el coche hasta la máxima velocidad legal y presione fuertemente el pedal del freno. Observe si el coche tira a la izquierda o a la derecha. El pedal del freno debe sentirse firme. Si la respuesta es suave o el pedal se nota blando, debe hacer una revisión de los frenos. Los frenos ABS actúan de manera diferente. Verifique la alineación: Cuando sea seguro hacerlo, suelte el timón y vea si el coche hala hacia alguno de los dos lados. Haga esto un par de veces en diferentes superficies del camino. Esta prueba le indica si hay problemas de alineación del tren delantero. Buscar una superficie con muchos baches: Podría ser un camino sinuoso o un sitio de estacionamiento que tenga reductores de velocidad. Vea cómo responde el coche cuando pasa sobre este tipo de superficie. No debe moverse como un plato de gelatina.
Mantenga la boca cerrada: Este es un viejo truco del periodismo que trabaja también cuando se trata de la compra de autos usados. La gente odia el silencio, ya que es una motivación para hablar. Usted se sorprenderá cómo, muy frecuentemente los propietarios comienzan a hablar sobre los problemas del vehículo cuando se presenta un chirrido o una vibración. Ponga a funcionar el equipo de música durante un corto período y suba el volumen para ver si escucha distorsión en el sonido de los parlantes. EVIDENTEMENTE, no conduzca con música ni con el ruido del ventilador a tope
Estacionar: Lleve el coche a un sitio de estacionamiento. Observe qué tan fácil es estacionar. (Los habitantes de las ciudades también deben probar aparcar en paralelo). Los sitios de estacionamiento pueden ser un buen indicador sobre la visibilidad del vehículo a baja velocidad. Problemas que se presentan a 10 km/h se multiplican exponencialmente en una autopista congestionada.
K. Griffin
Si algún aspecto de la prueba de manejo lo hace sentir incómodo, retírese. Confíe en su instinto.
La preparación es clave. Asegúrese que usted es un comprador de coches usados bien informado, antes de hacer la prueba de manejo. Un poco de trabajo de investigación lo llevará a un coche usado que supere sus expectativas.
Además, este no es el momento de diagnosticar problemas. Ese no es su objetivo en una prueba de manejo. Usted quiere identificar problemas que su mecánico pueda inspeccionar y ofrecer soluciones, incluyendo precios. No trate de resolver los problemas del vehículo durante la prueba.
2- Defina el Mapa de la Ruta de Conducción: No conduzca al azar y no permita que el propietario dirija el viaje. Google Maps o el tomtom pueden ayudarle. Configure la ruta de prueba con una mezcla de calles urbanas, carreteras, y un sitio de estacionamiento grande y vacío. Un trayecto largo en una carretera empinada, es un buen lugar para probar la aceleración del vehículo. Además, lleve un bloc de notas o una grabadora. Estos le pueden ayudar a recordar lo que le guste y lo que le disguste. Además le permitirán recordar lo que usted quiera que su mecánico inspeccione.
No lleve toda su familia a la prueba. Pueden hacer que se distraiga. Hágase acompañar de su cónyuge u otra persona que esté involucrada en el proceso de decisión. Si usted tiene niños pequeños, traiga sus sillas de seguridad o asientos elevados para comprobar si se pueden colocar bien. Eso sí, no traiga a los niños. Es necesario que usted pueda dedicar el 100% de su atención a la prueba.
Ejecute la prueba totalmente: Negocie la duración de la prueba de conducción. Solicite por lo menos media hora. Es poco probable que el propietario le permita hacer la prueba solo, pero vale la pena intentarlo. Además, solicite todos los registros del coche, incluyendo los registros de mantenimiento y asegúrese que las herramientas básicas para el cambio de neumáticos están en el vehículo.
3- Mientras el coche está estacionado. Camine alrededor del coche e inspeccione las llantas para verificar que están infladas adecuadamente. Mire si el parabrisas tiene peladuras o si la carrocería se ve muy deteriorada. Inspeccione el baúl para ver si cumple con sus necesidades de almacenamiento. Examine si el baúl muestra humedades. Doble el espaldar del asiento trasero para verificar si tiene paso hacia el baúl. Retire ambientadores de aire que podrían enmascarar olores.
Antes de salir. Verifique la facilidad para sentarse y salir del coche. Vea que tan fácil es abrir y cerrar las puertas. Pruebe los ajustes del timón. Asegúrese que el asiento puede ajustarse a su mayor comodidad. Ajuste todos los controles y vea qué tan fácil es entender cómo funcionan. Verifique los espejos para ver qué tan fácil es ajustarlos. Pruebe el aire acondicionado y la calefacción en sus máximos niveles. Si el coche tiene un sistema de ambientación en la parte de atrás, pruébelo también. Compruebe si todas las rejillas de ventilación funcionan bien. Mire con qué facilidad pasa el coche de un cambio a otro. Dele arranque al coche y verifique el esfuerzo requerido para dar vuelta a la llave y para retirarla cuando se apaga el vehículo. Asegúrese que el propietario tiene un juego de llaves de repuesto.
4- Camine alrededor del vehículo: Busque desperfectos en el parabrisas o un desgaste excesivo de la carrocería. (Habrá algunas abolladuras y rayones en casi todos los coches usados). Muchas abolladuras y rayones en la parte baja de la carrocería podrían indicar que el coche ha sido conducido en condiciones inferiores a las ideales. Asegúrese que los neumáticos están correctamente inflados. Eche un vistazo al maletero ¿Cumple sus necesidades de almacenamiento? Mida una bolsa de supermercado abierta para ver si cabe. Compruebe si el baúl se ajusta también a sus necesidades de recreación. No tiene que llevar su bici, pero una cinta métrica le sería muy útil. También, busque señales de fugas. Pregunte si el asiento trasero es abatible para dar más espacio y entonces asegúrese de que sí lo es. Limpie el aire: Tome el ambientador, si está colgado del espejo retrovisor y colóquelo en la guantera. Una vez haya terminado de conducir, haga una buena prueba de olfato al vehículo. No tenga miedo de pasar su nariz por los asientos para verificar si han aparecido olores. La Prueba del Guante Blanco: Mire el interior para buscar manchas o suciedades. Lo más probable es que están hace mucho tiempo si el propietario nunca los ha limpiado.
5- Si usted aún está interesado, pregunte al propietario cuando puede llevar el coche a su mecánico. Nunca decida comprar un coche que no ha sido inspeccionado en forma independiente. Usted se estaría arriesgando a sufrir muchos dolores de cabeza.
Haga sus notas de inmediato con las preguntas y preocupaciones que le transmitirá a su mecánico. Además, tómese un momento para calificar el coche. Use este sistema de evaluación que le será muy útil.
Si usted tiene dudas, retírese. Hay un montón de coches para la venta.
6- Entrada y salida: Entre y salga del coche un par de veces. Tenga una idea de qué tan cómodo es para usted, qué tan bien abren y cierran las puertas y qué tan pesadas son. Mire a ver qué tan fácil es alcanzar la manija de la puerta. Suba también al asiento trasero. Mire a ver si el vehículo va a ser un buen transporte para personas, si eso es importante para usted. Ubíquese en el asiento del conductor: Verifique si puede ajustar el asiento de acuerdo con su comodidad. ¿Los controles de ajuste del asiento son fáciles de operar cuando la puerta está cerrada? No se ponga en riesgo. Usted tendrá que pasar decenas de miles de kilómetros al volante. No haga ninguna cosa inferior a lo perfecto. Juegue con los controles: Ajuste los espejos. Mire si los controles del radio y los del aire acondicionado son de fácil acceso. Ajuste del timón: Verifique el volante para ver si se inclina o se pliega como un telescopio. ¿Lo puede colocar en una posición en la que se sienta cómodo? ¿Los botones de control de audio y de control de la velocidad de crucero trabajan correctamente? Prueba del aire acondicionado y la calefacción: Asegúrese que soplan aire frío y caliente. Pruebe el frío antes del calor ya que toma un tiempo para que el motor se caliente. El aire frío debe soplar en menos de un minuto. Coloque las temperaturas en sus extremos. Compruebe las rejillas de ventilación para ver si se cierran y abren suavemente. Ubíquese en el asiento trasero para asegurarse que los sistemas de aire acondicionado y calefacción funcionan allí, también. Obtenga una idea de la transmisión: ¿Pasa el coche con facilidad de la posición de parqueo a la de conducción si el coche tiene transmisión automática? Un ruido fuerte no quiere decir que haya un problema en sí, pero tome nota para que su mecánico pueda verificar que la transmisión funciona bien. Una transmisión manual debe pasar fácilmente entre los cambios. El embrague debe facilitar también la operación de la caja de cambios. Girar la llave: Es algo que va a hacer al menos dos veces al día durante todo el tiempo que sea propietario del coche. Observe si el coche arranca con facilidad: no solamente cómo arranca, sino cuánto esfuerzo es necesario para girar la llave. Además, vea qué tan fácil es quitar la llave. Por último, asegúrese que el vendedor tiene dos juegos de llaves e incluso una llave para valet. Las llaves pueden ser costosas de reemplazar.
7- En el camino Conduzca responsablemente. Mezcle la ruta entre calles y autopistas. Compruebe la dirección. ¿Hay mucho juego en la timón antes de que el coche responda? Pise fuertemente el freno cuando sea seguro hacerlo. ¿El coche tira hacia un lado? ¿Los frenos se sienten blandos? Suelte las manos del timón en un sitio de estacionamiento vacío. Esto le mostrará qué tan bien alineada está la dirección. Conduzca sobre una superficie irregular y vea cómo responde el coche. (Los reductores de velocidad son suficientes si no hay disponible un camino lleno de baches). Mantenga la boca cerrada. Escuche los problemas. Deje que el propietario del coche sea quien hable. Trate de estacionar el auto en un sitio de estacionamiento ocupado. Los habitantes de la ciudad deben ensayar el estacionamiento en paralelo. Ambos son buenos indicadores de la visibilidad del vehículo a baja velocidad. Final de la Prueba Si todavía está interesado, averigüe cuando puede llevar el coche a una inspección de su mecánico.
Haga de inmediato las anotaciones para que pueda preguntar a su mecánico sobre los problemas potenciales.
Califique el coche de 1 a 5 estrellas, lo que le ayudará a ordenar rápidamente los coches que está viendo. Si usted tiene alguna duda, retírese. Hay muchos coches para la venta.
8- Conduzca responsablemente: No corra como una liebre desde el principio. Hará que el dueño se ponga nervioso y, probablemente, dañará el negocio. Sin embargo, no dude en hacerlo una vez que se sienta cómodo con el vehículo. Solamente advierta al dueño que lo va a hacer. Conduzca por una ruta mixta: Observe qué tan bien entra el coche a una autopista. Observe cómo es la visibilidad en las calles urbanas. Observe qué tan fácil es la visión de las señales de tráfico. La dirección: ¿Cuando usted da vuelta al timón, la dirección responde con prontitud? ¿O hay alguna demora en la respuesta? El timón no debe tener ningún tipo de juego. Pruebe los frenos: Busque una zona tranquila, lleve el coche hasta la máxima velocidad legal y presione fuertemente el pedal del freno. Observe si el coche tira a la izquierda o a la derecha. El pedal del freno debe sentirse firme. Si la respuesta es suave o el pedal se nota blando, debe hacer una revisión de los frenos. Los frenos ABS actúan de manera diferente. Verifique la alineación: Cuando sea seguro hacerlo, suelte el timón y vea si el coche hala hacia alguno de los dos lados. Haga esto un par de veces en diferentes superficies del camino. Esta prueba le indica si hay problemas de alineación del tren delantero. Buscar una superficie con muchos baches: Podría ser un camino sinuoso o un sitio de estacionamiento que tenga reductores de velocidad. Vea cómo responde el coche cuando pasa sobre este tipo de superficie. No debe moverse como un plato de gelatina.
Mantenga la boca cerrada: Este es un viejo truco del periodismo que trabaja también cuando se trata de la compra de autos usados. La gente odia el silencio, ya que es una motivación para hablar. Usted se sorprenderá cómo, muy frecuentemente los propietarios comienzan a hablar sobre los problemas del vehículo cuando se presenta un chirrido o una vibración. Ponga a funcionar el equipo de música durante un corto período y suba el volumen para ver si escucha distorsión en el sonido de los parlantes. EVIDENTEMENTE, no conduzca con música ni con el ruido del ventilador a tope
Estacionar: Lleve el coche a un sitio de estacionamiento. Observe qué tan fácil es estacionar. (Los habitantes de las ciudades también deben probar aparcar en paralelo). Los sitios de estacionamiento pueden ser un buen indicador sobre la visibilidad del vehículo a baja velocidad. Problemas que se presentan a 10 km/h se multiplican exponencialmente en una autopista congestionada.
K. Griffin
